Lección del Día: 2/7/2010

Ya sabia que la gente hinchaba por Ghana, pero nunca imagine que tanto, el partido de cuartos de final no solo fue el más difícil para la celeste, si no que además fue el más difícil de sobre llevar con los marroquíes, durante el día ya la gente al saber que era uruguayo comenzo a decirme que hoy ganaba Ghana, como en todo país, también están los desubicados de siempre que además de hablar a favor del país africano insultaban a mi hermoso y amado Uruguay, y ahí se comenzo a picar el partido, no había forma que lograra controlarme, por mas que hacia como si nada ocurriera, por dentro sentía esa adrenalina previa a pelear que se va solo con la primer piña.

Llego el momento del himno, como me enseño el Tata, me puse de pie y entone las estrofas de la canción más hermosa del mundo.

El partido comenzó y la gente gritaba todas las jugadas en favor del adversario, mientras yo observaba callado sabiendo que iba a ser un partido muy complicado y el más largo de mi vida, el primer tiempo fue bastante aceptable, hasta que llego el primero gol, la gente lo grito y sentí como algunos lo gritaron en mi nuca, por lo tanto, sabiendo que terminaba el primer tiempo me pare y con la bandera, termo y mate, me fui solo afuera ya que existía una sola respuesta posible y no era recomendable.

A los pocos segundos llego Abdou, el chico que me esta hospedando, una excelente persona y con la cual hablamos mucho del respeto, el estaba mas nervioso que yo, habíamos hablado de que en Uruguay era más común que aquí y que el fútbol era un motivo importante. Pensaba que no iba a aguantar todo el partido sin armar lío, pero le dije que se tranquilizara, que tenia dos motivos para no pelear, el primero era no causarle problemas a el que tan bien me ha recibido, y el segundo era aprender a controlar mis impulsos, lo cual hace mucho tiempo vengo trabajando y hoy parecía ser mi examen final.

Mire mi reloj después de hablar un rato con Abdou y tranquilizarlo yo a él de que no iba a pasar nada e ingresamos al café para ver el segundo tiempo, ingrese con una enorme sonrisa mostrándome lo más amigable posible, pero creo que se noto que era fingida y en el fondo quería todo menos ser amigos de ellos.

Gracias Diego, no me importa si la pelota se movió, si el golero es horrible o lo que sea, pero nunca un gol me saco una sonrisa tan grande, mi cuerpo sin pensarlo salto de la silla y con la bandera bien en alto grité "Uruguay carajooooo" mientras del fondo del salón un tímido aplauso de un señor despertaba y algunos otros pocos lo seguían.

El partido siguió y no le di importancia a nada más que a la pantalla, no sabia ni me importaba si hablaban de mi o si se reían de mi, el asunto era entre la televisión y yo.
Cuando termino el segundo tiempo y se venia el alargue, mi cuerpo ya temblaba por completo, y la necesidad después de un termo de mate me hizo pararme e ir al segundo piso que tenia forma de balcón sobre el salón del Café para pasar al baño, pero ya aproveche y me quede ahí, sentado en el piso mirando la misma televisión, pero solo, con la efímera compañía de la gente que iba al baño.

El alargue fue el peor sufrimiento, me tire en el piso y respiración parecía como si hubiera corrido una maraton, mi cuerpo parecía sacado de la ducha gracias a las glándulas sudoriparas y mi corazón quería saltar el balcón y meterse en la cancha.

El alargue terminaba, íbamos a los penales, cuando en un entrevero veo que la gente se para y grita y celebra como si hubiera sido gol, pero simplemente se trataba de la mejor acción más perfecta de Suarez, y creo que merece ser llamada "La Otra Mano de Dios".

Claro que en el momento pensé que era el final, no podía creer que además de quedar eliminado me tenia que fumar a toda la gente, con toda la energía que tenia en el cuerpo y la adrenalina pensé que tiraba el termo a la TV, pero me senté, respire y simplemente espere desde arriba, sin que nadie me viera para evitar provocaciones el penal del No. 3, que gracias vaya uno a saber quien no termino en la red.
Pero las emociones recién comenzaban, ahora venían los penales, ya no sabia que en posición estar para sentirme bien, me sentaba o me acostaba ya que sentía que en cualquier momento me desmayaba, pero por otra parte estaba tan nervioso que precisaba moverme, por lo que
creo que cambie de posición unas cuantas veces antes de ver los penales parado sostenido de una columna.

Que puedo decir de los penales, ustedes vieron lo mismo que yo, solo puedo decir que termine tirado en el piso llorando y al instante sentí una estampida subir las escaleras y aplaudirme, pero yo no quería a nadie, solo quería mi bandera para estar conectado con lo que creo es la mayor alegría de mi pueblo desde que nací!

Se me cruzaba la alegría de mi familia, de mis amigos, en fin, de mi gente, celebrando y disfrutando este hermoso momento!

Finalmente, la gente no deseada termino felicitándome y diciendome en sus palabras que tuvimos terrible culo en el partido jaja!

No solo gane el pase a semifinales, también aprobé el examen final de control de impulsos jeje!